RUSIA: SAN PETERSBURGO

Nuestro hotel, situado al sur de la avenida Nevsky Prospekt, la calle principal y más popular, nos permite descubrir, mientras callejeamos, muchos de los encantos de esta ciudad: palacios, museos, iglesias, catedrales, edificios de arquitectura notable,... Con sus 4 km de largo, es una de las calles con más historia del mundo y muchos los escritores la mencionan en sus obras: Dostoievski, Tolstoi, Godol, Puskhin, ...
De la estación de Leningrado, en Moscú, partimos en un cómodo tren nocturno, amaneciendo en San Petersburgo, la capital querida por Pedro I el Grande como ventana hacia el mundo occidental. Bella e impresionante, la antigua Leningrado de los tiempos soviéticos, es el punto de referencia principal en la ruta de los zares, que tuvieron su Palacio de Invierno en el actual Museo del Ermitage. Su centro histórico fue designado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Para el desarrollo de esta ciudad, el zar Pedro I se inspiró en Venecia y en Amsterdam, promoviendo la construcción de canales sobre el río Neva. En la labor participaron los mejores arquitectos e ingenieros rusos y representantes de otros países europeos: Suiza, Francia, Italia,... y bajo la influencia de la arquitectura que se desarrollaba en esos países, en el siglo XVIII, se construyó un gran número de monumentos y conjuntos de arquitectura barroca y neoclásica.

Nuestro hotel, situado al sur de la avenida Nevsky Prospekt, la calle principal y más popular, nos permite descubrir, mientras callejeamos, muchos de los encantos de esta ciudad: palacios, museos, iglesias, catedrales, edificios de arquitectura notable,... Con sus 4 km de largo, es una de las calles con más historia del mundo y muchos los escritores la mencionan en sus obras: Dostoievski, Tolstoi, Godol, Puskhin, ...