En nuestro primer contacto con el país nos dirigimos al Mar Muerto donde experimentamos la suspensión en sus aguas debido a la salinidad, de allí nos fuimos a la Reserva de Dana pero, antes de llegar, visitamos Madaba y el Monte Nebo, lugares donde se desarrolla el Antiguo Testamento.
Llegamos a Wadi Musa impacientes por conocer Petra, la joya arqueológica reconocida como una de las 7 maravillas de mundo y que forma parte del Patrimonio de la Humanidad, pero antes, visitamos Pequeña Petra y paseamos por la ciudad.
De Petra nos dirigimos al desierto Wadi Rum, uno de los enclaves más famosos de Jordania, donde pasamos una noche. Y finalizamos nuestra estancia en el Mar Rojo, el arrecife marino que está considerado como uno de los más espectaculares del mundo.