6. EILEAN DONAN CASTLE - LOCH NESS –URQUHAR CASTLE- INVERNESS
20:30
Después de visitar el emblemático castillo de Eilean Donan, continuamos por las Tierras Altas hasta llegar al mítico lago Ness, donde visitamos las ruinas del castillo de Urquhar y Inverness, la ciudad más al norte del Reino Unido.
EILEAN DONAN CASTLE
Tan pronto abandonamos la isla de Skye, por el puente por Kyle of Lochalsh, retrocedimos unas pocas millas para visitar el castillo de Eilean Donan. Queríamos llegar a primera hora, ya que al ser uno de los castillo más emblemáticos de Escocia, hay mucha afluencia de turistas y autocares.
El castillo está emplazado en el montículo de una pequeña isla que se asoma a un lago. Un estrecho puente de piedra conduce a la fortaleza, que rodeada de agua, montañas y algas ofrece una imagen mítica, utilizada en el rodaje de películas como Los Inmortales, el Imperio contraataca de Stars Wars, La Trampa, El Mundo no es suficiente de James Bond, ...
La primera fortificación consta de 1220, aprovechando su situación estratégica en el lago para defender las tierras de las frecuentes incursiones vikingas. Más tarde, el clan MacRae convirtió el castillo en su residencia, y durante siglos la estructura se fue modificando hasta que finalmente se abandonó.
Es curioso saber que durante el levantamiento jacobita de 1719, después de que Francia se negara a apoyar la revuelta para devolver el trono inglés a los descendientes de la casa Estuardo, los escoceses pidieron ayuda a España, que envió un barco con 300 soldados que se apoderaron de él, pero la ocupación llegó pronto a oídas de los ingleses, que mandaron tres fragatas, bombardearon la fortaleza y consiguieron su rendición.
Y así pasaron muchos años de su historia, olvidada en ruinas, hasta que un descendiente del clan MacRae lo compró en 1911 y lo fue restaurando, convirtiéndose de nuevo en la residencia oficial de este clan y en una de las mayores atracciones turísticas de Escocia.
Tanto por fuera como su interior está muy bien muy bien restaurado y aunque sólo se puede acceder a la parte que no está habitada, vale la pena su visita. Con ayuda de la audioguía, mientras se recorren estancias, torreones y pasadizos secretos, se conoce la historia y complicidad de los clanes, su disputas y la vida en las Tierras Alta.
No se pueden hacer fotos y, debido a la existencia de espacios muy estrechos, no se puede entrar con mochilas. El precio de la visita es de 7,50 euros, el horario es de 10 a 18 horas y como es una propiedad privada no sirve el Explorer Pass. Es una visita aproximada de una hora y media.
Como curiosidad, subiendo al tercer piso se llega a los seis dormitorios que carecen de armarios, ya que el servicio se ocupaba de llevar la ropa limpia y planchada a la familia cada mañana.
La cocina es la última dependencia que se visita y está situada en la parte inferior del castillo. Consta de un horno de carbón y el menaje procede de la colección de la familia MacRae. Está ambientada con sonidos y olores como si no hubiera dejado de funcionar desde los años 30 y, es divertido buscar detalles, como los ratón que están escondidos por toda la estancia.
En una de las estancias del castillo había un muestrario de tartanes (telas) con la respectivas procedencias de los clanes.
Durante nuestro recorrido por las tierras altas, vimos que como el kilt o la típica falda escocesa, ha sobrevivido el paso del tiempo. De hecho, su origen está en la región de las Highlands. La tela con la que está fabricada se denominada tartán y tiene rayas verticales y horizontales en diferentes tonalidades sobre un fondo de color. Cada clan tenía su diseño y la gente utilizaba plantas de la región, musgo y bayas para teñir la lana.
Después de esta interesante visita al castillo de Eilean Donan, pusimos rumbo a Inverness.
LAGO NESS
No podíamos regresar de las Highlands sin acercarnos al mítico lago Ness, donde según las leyendas se oculta Nessie, el famoso monstruo, que aunque aún no ha sido descubierto sigue creando un encendido debate entre los defensores y los contrarios a su existencia. Nosotros, quisimos contribuir y lo estuvimos buscando pero tampoco lo encontramos, así tenemos otra excusa para volver al país.
El lago Ness es el segundo lago más grande de toda Escocia. Con 37 km de longitud y alrededor de 3 km de ancho, es también el más profundo –llega a superar los 200 metros en su punto más hondo- lo que hace que su volumen de agua sea el mayor de todo el país. De hecho, su capacidad supera el de todos los lagos que hay en Inglaterra y Gales juntos.
URQUHAR CASTLE
A orillas del lago Ness se encuentra el castillo de Urquhart, una de las fortalezas más pintorescas de Escocia, que se cree que se construyó en el siglo VI y, aunque en ruinas, su historia turbulenta y la leyenda de Nessie le añaden cierto tinte de misterio y encanto en la zona.
El castillo fue destruido en 1691 durante la Revolución jacobita, cuando las tropas inglesas lo incendiaron para evitar que los rebeldes se hicieran con él. Nunca fue reconstruido y lo único que nos ha llegado hoy son unas ruinas majestuosas que evidencian lo que un día fue. En 1913 pasó a manos del Estado y desde 2001 tienen un centro de interpretación que gestiona Historic Scotland.
Durante la visita, hay carteles informativos con ilustraciones que permiten tener una idea de lo que debió ser en su momento de mayor esplendor: la herrería, las cocinas, el calabozo y las estancias nobles, el foso, las huellas de una capilla,...
Desde los restos de la Grant Tower hay unas vistas increíbles del lago . Estuvimos mirando con la esperanza de ver a Nessie chapoteando por las aguas pero no tuvimos suerte.
INVERNES
Finalizamos el día en Inverness, la capital de las Highlands de Escocia. Es la ciudad está situada más al norte de todo el Reino Unido y, aunque nosotros llegamos allí atraídos por el enigmático lago Ness, nos sorprendió gratamente por su tranquilidad y su armonía.
Está coronada por un bonito castillo, que aunque no se puede visitar, porque es un edificio gubernamental, regala maravillosas vistas de la ciudad, que se despliega al paso del río Ness y de sus puentes.
Como nuestro alojamiento estaba situado muy próximo al castillo, iniciamos la visita a la ciudad con las magníficas vistas que se obtienen desde él y que lo convierten en el mejor mirador de Inverness.
Ascendiendo por la zona izquierda del río, se encuentra la catedral de Sant Andrews, que fue la primera catedral protestante completada desde la reforma. Comenzó a construirse en 1866 y completó sus obras a finales de 1869.
Inverness es una ciudad que se puede recorrer fácilmente en un agradable paseo.
Situada sobre una lomada que sobresale al costado del río, vemos Old High Church, la iglesia más antigua de Inverness, que tiene raíces celtas. Aunque la actual construcción, en su mayoría, data del siglo XVIII, algunas partes de la torre del campanario pertenecen al siglo XI.
Está iglesia también fue utilizada como un campo de prisión y, a su alrededor, hay un antiguo cementerio donde se dice ejecutaron a los prisioneros jacobitas de la batalla de Cumellen en 1746. También hay un mausoleo de la familia Robertson que nos llamó la atención por la cantidad de signos masónicos que tenía..
Dimos un paseo por Church street ,una de las calles mas antiguas y animadas de la ciudad. Cerca se encuentra Ness Walk street, con unos edificios muy bonitos que continuamente anunciaban "bed and breakfast" y tenían muy buena pinta. Nos quedamos con las ganas de alojarnos en uno de ellos, si volvemos, repetiremos ahí.
En contraste sobresalía una parte de la ciudad moderna.
Después de un agradable y apacible paseo buscamos un restaurante para cenar y nos decidimos por The Kitchen Brasserie, situados a orillas del río.
Se hacía ya de noche cuando nos fuimos a dormir, habíamos reservado un "bed and breakfast" cuya dueña acaba de regresar de Mallorca.
La casa era bonita, aunque las dependencias antiguas.
La casa era bonita, aunque las dependencias antiguas.
Descansamos y al día siguiente continuamos la ruta.
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